Hemos visto cómo la alimentación ha ido evolcuionando con el tiempo, así como los conocimientos sobre la misma. Se han descubierto dietas de todo tipo, cetogénicas, paleolíticas, y vegetarianas. Y en esas nuevas formas de alimentarse surgen alternativas y reemplazos como es el caso de las proteínas animales y vegetales.
Isoleucina: el aminoácido que ayuda a controlar niveles de azúcar, sintetizar proteínas y aumentar la masa muscularLas proteínas son macromoléculas también llamadas aminoácidos. La etimología de la palabra ya nos aporta pistas de la importancia de este nutriente para nuestra salud. “Proteios” significaba en el griego “primero” y explicaba la importancia y el caráracter primordial del mismo. Lq porteína es la encargada de construir estructuras, regular procesos químicos y transportar sustancias vitales.
Proteína vegetal o animal, la diferencia entre ambas fuentes
Una de las fuentes predilectas de proteínas son los animales. El pollo, el pescado, la vaca son algunos de los proveedores de este nutriente. Sin embargo en el último tiempo han proliferado también sus alternativas, como es el caso de las legumbres. Así es que en cadenas rápidas podemos encontrar el el menú vegetariano, hamburguesas hechas a base de lentejas que dicen aportar los mismos valores nutricionales que una animal.
Para saber cuáles son las mejores proteínas es fundamental conocer sus diferencias. Primeramente este nutriente se divide en dos grupos, los esenciales, que el cuerpo no sintetiza y deben ser obtenidos a través de la alimentación y los no esenciales que nuestro organismo puede producir.
Las proteínas animales contienen todos los aminoácidos esenciales, mientras que la mayor partes de las fuentes vegetales no. Sin embargo este no debe ser motivo de aversión hacia los futos secos, las legumbres o las semillas ya que pueden complementarse con otros alimentos como los cereales y así aportar los nutrientes faltantes.
Legumbres o carne ¿cuál es la mejor para nuestra salud?
Así también las fuentes vegetales pueden aportar otros nutrientes beneficiosos para la salud como la fibra o la vitamina E. En cambio en el caso de la proteína animal muchas veces estas pueden contener compuestos incluso perjudiciales como el sodio y las grasas saturadas y trans. También el consumo de proteínas animales puede suponer un cierto impacto ambiental debido a la mayor limitación de los recursos naturales, por lo que lograr una dieta más sostenible puede ir de la mano de las proteínas vegetales.
Sin embargo, ambas proteínas son adecuadas y recomendables para seguir una dieta equilibrada y saludable. Ambos grupos de proteínas pueden ser beneficiosos e incluso combinarse para lograr un balance en nuestra alimentación.